Por @lissjortega
Se acerca un taller de mentalidad emprendedora, el próximo 13 de febrero, en el cual aprenderemos acerca de aquello que deberíamos transformar en nuestra forma de pensar, antes de iniciar nuevos proyectos.
Lo cierto es que transformarnos requiere inicialmente, saber quiénes somos.
Saber quiénes somos no es tan difícil como pensamos (lo primero es querer aceptarnos y amarnos tal cual somos).
Pero antes de ir a los detalles, debemos saber que como seremos humanos, la ciencia dice que somos:
40% genes
60% entorno
40% genética
Esto quiere decir que una gran parte de nosotros (la no heredada) la podemos transformar para mejorar todo lo que nos rodea.
De esto también estamos hechos
Además de nuestras características físicas, también hace parte de nosotros la estructura del cerebro que determina nuestro temperamento (distinto a la personalidad).
Expertos y psicólogos afirman que existe una relación entre el temperamento que heredamos y la estructura del cerebro.
Estas características anatómicas varían según cada persona y reflejan rasgos de personalidad específicos para cada individuo.
La idea es ser conscientes de que no somos nuestro pasado, ni tampoco sencillamente un producto de nuestros genes; nuestro entorno tampoco es el absoluto responsable de nuestros fracasos o éxitos.
Pero sí somos una combinación de todo ello… nos hemos formado y seguimos aprendiendo de todo a la vez.
Nuestro cableado cerebral se formó así
Lo importante es saber que en nuestro “cableado cerebral”, han jugado un papel importante la educación recibida, los libros que leímos, las cosas que nos dijeron desde niños (aunque no podamos recordar de manera consciente) y nuestra herencia.
También han influido los amigos con los que hemos compartido, las experiencias, decepciones, ilusiones vividas y no vividas.
En otras palabras, todo ha sido parte de lo que hemos llegado a ser y decidir en cada etapa.
Somos un poco la transformación a partir de las actividades del día a día, las aventuras que emprendimos, la comida que ingerimos, las ciudades o países donde hemos vivido, las personas que nos han escuchado y a las que hemos prestado atención.
Es decir, desde un profesor hasta un animalito… todo nos ha dejado lecciones CONSCIENTES O INCONSCIENTES; aprendizajes que de alguna u otra forma determinan nuestras acciones y lo que hacemos y no hacemos día a día, lo que soñamos y lo que anhelamos.
Por ello, tratar de encontrar culpables de nuestra situación actual (si no es favorable), es una pérdida de tiempo, pero sí es bueno ser conscientes de las causas que pudieron llevarnos a ser o comportarnos de ciertas maneras.
Por qué conocerte y seguir transformándote
Por estas razones hoy, a partir de todos estos aprendizajes, te invito a ser consciente de que tus padres no tuvieron la culpa de tus problemas, no son los responsables de tus fracasos, pérdidas o decepciones, así como tampoco son la única razón de tu felicidad, prosperidad o éxito.
Si somos verdaderamente conscientes de ello, estaremos abiertos a enfrentar lo que venga.
Y con ello, a aprender de los acontecimientos que surjan, a cambiar hábitos, a pensar distinto, a eliminar prejuicios que nos detienen, a desaprender lo que sea necesario para deconstruirnos y vivir los procesos necesarios que cada uno necesita para moverse con libertad y seguridad.
Por todo lo anterior, te invitamos a asistir a este taller virtual el próximo 13 de febrero a las 5 p.m. Será una fructífera sesión de 2 horas mediante Zoom y la inscripción es gratuita.